Las compramos en junio de 2024 y ha pasado cerca de un año para que las máquinas estuvieran en la sede y se instalaran.
El molino aun no está funcionando esperando el permiso final de la compañía eléctrica; las mujeres de Jigeen Senegal tienen que ir aun fuera para moler los cereales. ¡Los ritmos y los tiempos son lentos en general!
Con la máquina para hacer pasta de cacahuetes ya llevan trabajando unos meses. Además de utilizarla para la preparación de la harina enriquecida (empleada para la recuperación de la población Infantil con malnutrición aguda moderada, MAM), la población la consume habitualmente, sobre todo durante el Ramadan. Nos dicen que tienen bastantes pedidos.
El grupo de cereales locales tiene una actividad continuada y las mujeres que lo integran están muy involucradas e ilusionadas. Han presentado proyecto para solicitar un crédito que les permita aumentar la producción y venta.
